Aumento de la fealdad en Fráncfort del Meno

Me han dicho que debo escribir cosas que inviten a la alegría, el romanticismo, a mirar la vida de una manera "positiva", sin embargo debo decir que me es difícil cerrar los ojos y dejar de criticar, es decir, de filosofar. Ayer caminé por el Osthafen (Muelle del Este en Fráncfort) donde cada dos semanas se realiza el Mercado de Pulgas que antes estuvo constantemente a las orillas del Meno en la parte de Sachsenhausen (se me olvidó la traducción de este nombre). Como se puede ver en la foto adjunta, ese lugar es donde el invierno perfora, más que el frío, la piel de la estética y la congela. Dicen que los Partidos Políticos de color negro, verde y amarillo han decidido, un una primera fase, intercalar el Osthafen con Sachsenhausen y en una segunda etapa, pues realizar sólo un Trödelmarkt, es decir un Mercado de Antigüedades a las Orillas de Sachsenhausen. El Partido de color rojo estuvo en desacuerdo, pero como ya no tiene ni voz ni voto en los últimos tiempos ni en la política comunal ni en la de Hesse, pues se nota que la decisión de no permitir la presencia de vendedores, sobretodo, de orígen internacional, está logrando sus objetivos. En Osthafen casi tod@s l@s vendedores/as son internacionales (utilizo este término para no decir extranjero, pues me suena a segregación). Pienso que poco a poco, se establecerá sólo el Mercado de Pulgas, digo el de Antigüedades en esta ciudad que más y más parece estar a favor de gente motorizada y en truncar la comunicación y el intercambio internacional. Yo lamento este proceso, pues el Mercado de Pulgas es un lugar de relajamiento,de observación, donde surge aún, cada fin de semana, un ambiente quasi anticonsumista, pues casi todas las cosas son de segunda o tercera mano.